domingo, 26 de mayo de 2013

USA 94

Mi primer recuerdo de un gran torneo futbolístico fue el mundial de USA 94. Entonces podíamos disfrutar de todos los partidos en abierto y pudimos gozar de todos y cada uno de ellos de principio a fin del torneo. Todo allí era diferente, ni el fútbol era fútbol, era soccer. El color de la televisión era diferente, el corte del césped era extrañísimo, y todo ello con un gran protagonista, el balón. Este mundial se jugó con uno de los mejores balones jamás fabricados, el Questra de Adidas. El mundial de fútbol estaba en todos lados: en los cereales, en las patatas fritas... por no hablar de la colección de cromos de Panini.

Aquel mundial lo recodaremos por pequeños detalles, como las celebraciones de Yekini en el fondo de la porteria o la de Bebeto y compañia acunando a un niño imaginario, la perilla de Alexi Lalas, las rastas de un jovencísimo Henrik Larsson, la camiseta multicolor de Campos, los nombres de los jugadores en las camisetas...

Pero en USA 94, sobre todo, tuvieron lugar grandes momentos que pasarán a la historia del mundo del fútbol: los 5 goles de Oleg Salenko frente a Camerún (que finalmente quedó empatado con Stoichkov a 6 goles en la tabla de máximos goleadores), el cruel asesinato de Escobar por meterse un gol en propia meta que impedía a Colombia pasar a octavos de final, el último gol de Maradona en un mundial, ya que después fue apartado por dar positivo (después de aquello todos entendemos el porqué de la efusividad en la celebración del gol), a todo un Roger Milla metiendo gol a sus 42 años y como no el penalti fallado por Roberto Baggio.

El mundial contaba con 24 selecciones, y no con 32 como se hace en los mundiales de ahora. Se formaron 5 grupos de 4 en la que pasaban a la siguiente ronda los dos mejores y los 4 mejores terceros.

En el grupo A, una gran Rumania liderada por un tal Gica Haggi se clasificó como primera de grupo, seguida por la Suiza del mítico Chapuisat. Una de las mejores terceras selecciones fue el equipo anfitrión, USA. Recuerdo a jugadores como Cobi Jones o el arquero Toni Meola. La mala suerte se cebó con Colombia y quedó apeada del mundial con el autogol de Escobar y su injusto final.

A Brasil le tocó jugar en el grupo B, uno de los grupos más bonitos y más variopinto. La canarinha se clasificó sin grandes problemas seguida por una sorprendente Suecia y su ataque letal con Brolin, Dahlin y Andersson. Rusia y Camerún se quedaron fuera.

El grupo C fue el grupo de España y Alemania, que se clasificaron sin grandes problemas ante una rocosa Corea del Sur y una débil Bolivia. Recordaremos el gol de Goikoetxea en ese centro-chut (creo que era a Illgner) que aún no sabe si decirnos si fue queriendo o fue sin querer.

Gran pelea hubo fue en el grupo D para poder clasificarse, en el que Nigeria, Bulgaria y Argentina empataron a 6 puntos. Suerte para Argentina que fue una de las mejores terceras selecciones y pudo pasar a la siguiente fase. Grecia pagó la novatada y se fue con 0 puntos, 0 goles a favor y 10 en contra.

Mayor fue la competencia en el grupo E, puesto que la clasificación marcaba un cuadruple empate a 4 puntos de los 4 equipos. Aquí es donde nos encontramos con la subcampeona del campeonato que tuvo que sudar de lo lindo para meterse en los octavos de final, ya que se clasificó como otra de las mejores terceras. México e Irlanda fueron primera y segunda de grupo, mientras que Noruega se quedó en la cuneta. Detalle realista (I): John Aldridge marcó ante México en la derrota de Irlanda 2-1.

Para finalizar la fase de grupos, el grupo F lo comandó una potente Holanda en el que un joven llamado Dennis Bergkamp comenzaba a mostrar pinceladas de lo gran futbolista que podía ser. Una sorprendente Arabia Saudí quedó en segundo lugar, y como cuarta mejor tercera quedó Bélgica liderada por el mejor portero del torneo: Preud´homme. Marruecos fue la eliminada de este grupo.

En los octavos de final España, Holanda, Suecia y Alemania no sufrieron para eliminar a Suiza, Irlanda, Arabi Saudí y Bélgica, respectivamente. Más sufrieron Brasil que necesitó de un solitario gol de Bebeto para deshacerse de USA, e Italia para apear a Nigeria con un gol de Roberto Baggio de penalti en la prórroga. El partido del infarto fue el México-Bulgaria que se decidió en la tanda de penaltis a favor del conjunto bulgaro. La sorpresa llegó de las manos de Rumania, que eliminó a Argentina.

Llegan los cuartos de final y ya no quedaba equipo fácil. El Italia-España siempre será recordado por el codazo de Tassotti a Luis Enrique y el mano a mano que tuvo Julio Salinas ante Pagliuca. El gol del Roberto Baggio al final de partido les dio el pase a semifinales.

Como hemos disfrutado siempre con los Brasil-Holanda, ¿verdad? Pues el partido de cuartos de final entre estos dos fue puro espectáculo. Posiblemente el mejor partido de todo el torneo, en el que un gran gol de Branco decidió la eliminatoria a favor del equipo brasileño.

En los otros dos partidos de octavos Alemania fue sorprendida por Bulgaria y Suecia eliminó en los penaltis al gran conjunto rumano. Detalle realista (II): Hakan Mild falló su lanzamiento de penalti.

Las semifinales fueron muy ajustadas y Brasil e Italia eliminaron por la mínima (1-0 y 2-1) a Suecia y Bulgaria. Estos dos últimos jugaron el tercer y cuarto puesto, en el que Suecia le dio todo un repaso al equipo de Stoichkov por 4-0. Detalle realista (III): El propio Hakan Mild fue uno de los goleadores (aunque no os lo creais).

17 de julio de 1994, estadio de Rose Bowl de Los Angeles y más de 94000 asistentes. Día para la historia. El juego alegre de la canarinha frente al poderío defensivo italiano y su contra-ataque. No hubo grandes ocasiones en los primeros 90 minutos, no así en la prorroga donde ambos equipos disfrutaron de varios remates para llevarse el partido pero sin acierto.
 

La gloria o la derrota tenía una distancia, 11 metros. La primera vez en la final de un mundial que iba a decidirse de esa manera. Fue desde allí donde Roberto Baggio no acertó a colocar el balón entres los tres palos dándole a Brasil su cuarto mundial. Romario levantó la copa del mundo que fue tan caprichosa pero justa a su vez. Brasil tenía el mejor combinado de jugadores. Jugadores con magia como Bebeto o Romario, y jugadores duros como Mauro Silva o Dunga.

Tal vez puede que sea por ser mi primer recuerdo de un mundial, pero en mi opinión el mundial más especial que he vivido; el más apasionante y del que más he podido disfrutar. Muchas de las estrellas que he conocido durante toda mi vida comenzaron su camino en aquel mundial Además el fútbol aún seguía siendo fútbol de verdad. El fútbol de hoy en día tiene mucho que aprender de aquella época, ya que se ha desviado hacia unos lugares que no lo hacen tan puro como elque era entonces.


















1 comentario:

  1. Luego hay gente más vieja, en la que el primer mundial que recuerda fue el de Italia 90. Otro gran Mundial (y como has puesto tú también, el Mundial salía en todas partes. Anda que no comía un bollicao detrás de otro más que nada para conseguir las pegatinas que venían para pegarlas en los libros y cuadernos del cole ;-P)

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